perracafuriosa: No tiembles con la tormenta. Tiembla con la calma, ya que te acostumbras a ella sin sí quiera pensártelo y cuando menos esperas estás en el filo del precipicio.
perracafuriosa: No tiembles con la tormenta. Tiembla con la calma, ya que te acostumbras a ella sin sí quiera pensártelo y cuando menos esperas estás en el filo del precipicio.