Casarte y que el coro te cante el himno de la Champions… No tiene precio… Para su mujer es equivalente a que ella ponga la banda sonora de “El Barco” o “CrePúsCulo”. O ella está profundamente enamorada y no espera nada a cambio (lo dudo,
Casarte y que el coro te cante el himno de la Champions… No tiene precio… Para su mujer es equivalente a que ella ponga la banda sonora de “El Barco” o “CrePúsCulo”. O ella está profundamente enamorada y no espera nada a cambio (lo dudo,